Depresión Karynzharyk, Mangystau
La Depresión Karynzharyk presume de impresionantes paisajes de otro mundo que parecen sacados de una película de ciencia ficción. Su remota ubicación en Mangystau hace que esté a un día entero de viaje, atrayendo sólo a los exploradores más aventureros y bien preparados.
Enclavada en el extremo sur de Mangystau, cerca del borde occidental de la meseta de Ustyurt y a sólo 25 km de Turkmenistán, la depresión abarca 2.000 kilómetros cuadrados. Su punto más bajo desciende 75 metros por debajo del nivel del mar. Esta vasta zona incluye la marisma salada de Kenderli, que cubre el 10% del territorio, el desierto arenoso de Karynzharyk, con dunas que alcanzan los 15 metros de altura, y las montañas-islas de Onere, que se elevan hasta 150 metros, junto al manantial salobre de Onere.
Las cinco montañas, sobre todo el trío conocido localmente como los "Tres Hermanos", son restos del antiguo fondo oceánico de Tethys (Tetis). Encaramadas sobre la marisma salada, crean una vista impresionante que cambia con el tiempo y la hora del día. El paisaje es especialmente fascinante después de la lluvia, cuando una fina capa de agua sobre la marisma salada la transforma en un inmenso espejo.
El clima continental de Karynzharyk registra temperaturas cercanas a cero en invierno y superiores a 40 grados en verano. Las lluvias son escasas y caen sobre todo en primavera, acompañadas a menudo de vientos polvorientos. Las mejores épocas para visitarla son los meses más templados de abril-mayo y septiembre-octubre.
Al formar parte de la Reserva de Ustyurt, la visita a Karynzharyk requiere el pago de una tasa especial. Es probable encontrarse con personal de la reserva, por lo que es esencial tener a mano el recibo de pago.
Para llegar a Karynzharyk desde Aktau hay que recorrer 310 km en coche: 165 km por asfalto hasta el pueblo de Kulandy, cerca de Zhanaozen, y 145 km por terreno variado. El viaje suele durar unas 7 horas. La mayoría de los visitantes combinan este viaje con una excursión a Mangystau, partiendo de una pernoctación en el tracto Bozzhyra, lo que reduce el viaje a 150 km por carreteras similares, con una duración aproximada de 5 horas.
Dado el desafío y el aislamiento, es vital una preparación completa: un vehículo todoterreno bien equipado, herramientas, rueda de repuesto, mapas por satélite precargados y, para emergencias, un teléfono por satélite. También hay que llevar agua suficiente, combustible y equipo de acampada para las condiciones del desierto y para pasar la noche.
Antes de llegar a los miradores, se recomienda hacer una parada en el manantial de Onere. Su pequeño estanque de color turquesa ofrece un refrescante oasis, por lo que es una buena idea llevar ropa de baño para una visita en verano.
Se puede acampar cerca del manantial o en lo alto de los acantilados de la meseta de Ustyurt. Este último lugar ofrece la oportunidad de contemplar impresionantes puestas de sol y disfrutar de la astrofotografía, con la constelación de la Osa Mayor brillando por encima de las montañas-islas.
La Depresión Karynzharyk es una joya cautivadora y solitaria, a diferencia de la más frecuentada Bozzhyra. El largo viaje y la minuciosa planificación necesarios para llegar a ella merecen la pena por la inolvidable experiencia y el sereno aislamiento que ofrece.