Tesoros de Turkmenistán - Alfombras

Alfombras Turcomanas

Turkmenistán es famoso en todo el mundo por sus magníficas alfombras, las cuales son tejidas por las manos de las mujeres turkmenas. El trabajo de las tejedoras de alfombras puede ser comparado con una heroica acción. Si bien en la actualidad realizar alfombras es un trabajo hecho por profesionales, en el pasado cada mujer en Turkmenistán podía tejer alfombras.

La alfombra es el símbolo de la gente turkmena. Las alfombras turcomanas, cuyo color dominante es el rojo oscuro, son tejidas con lana, algodón y seda. La leyenda cuenta que las “alianzas” dejadas por Oguz Khan (un legendario ancestro de los turkmenos) a su hijo, fueron incorporadas en los ghels (diseños) de la alfombra turcomana. En Turkmenistán, cada tribu tiene su ornamento particular, la alfombra es tan sagrada, que incluso la bandera nacional tiene los ornamentos de las alfombras en ella. Una verdadera alfombra es una pieza de arte en sí y es muy costosa. Para comprar una es necesario ir a un local o mercado especializado.

El arte de hacer alfombras turcomanas se originó hace mucho tiempo. Los restos de cerámica hallados que datan de los siglos III-IV AC, revelan que los ornamentos de estas antiguas cerámicas eran completamente idénticos a los diseños de las alfombras turcomanas.

Alfombras Turcomanas

En el siglo III AC las alfombras Partas eran extensamente exportadas a la antigua Europa y apreciadas por los emperadores romanos. En el siglo XIII apareció evidencia escrita acerca de las alfombras turcomanas. El famoso viajero Marco Polo, quien visitó Asia Menor, escribió con mucho entusiasmo acerca de las alfombras turkmenas, refiriéndose a ellas como “las más refinadas del mundo”.

Desde finales del siglo XIX las alfombras turkmenas comenzaron a ser mostradas en muchas ciudades de Rusia y Europa. Las alfombras turcomanas fueron exhibidas durante ferias Mundiales en Paris, San Petersburgo, Berlín y Washington. Son mantenidas alrededor del mundo en colecciones privadas de personas famosas.

Cada oasis turkmeno tiene su diseño único, pero todos ellos, a pesar de las diferencias, tienen un origen y semántica en común, ¡todo lo que conforma a una alfombra turcomana!

Junto con el ornamento estrictamente geométrico, las alfombras turkmenas contienen numerosas imágenes estilizadas de animales: carneros, camellos, caballos, pájaros, etc. Los ghels de las alfombras turkmenas representan la imagen estilizada de la Tierra en el Universo.

Los ornamentos fueron creados en referencia al centro de la alfombra. El centro simboliza el sol. Similar a las pirámides egipcias que encierran muchos misterios, los ornamentos de las alfombras turkmenas también guardan información la cual probablemente otorga acceso a la civilización turkmena única.