Cultura de Kirguistán

Cultura de Kirguistán

La cultura de Kirguistán está fuertemente influenciada por las tradiciones de la vida nómada. La cultura kirguisa tiene influencias de Rusia, Persia y Turquía, pero sigue siendo algo totalmente único. La influencia de la naturaleza es algo a destacar, desde los diseños hasta la música, y muchas tradiciones reflejan el hecho de que los nómadas vivían de cerca la naturaleza. Quizás el aspecto más conocido de la cultura kirguisa es la Epopeya de Manas, un poema increíblemente largo transmitido oralmente durante generaciones.

Como nómadas, el pueblo kirguís siempre vivió de cerca la naturaleza. Desde sus viviendas hasta su ropa, todo fue diseñado para adaptarse a los cambios de clima y ubicación. Las yurtas son fáciles de desmontar y transportar, y se pueden hacer más calientes para el invierno y más frescas para el verano. Los tejidos del interior de las yurtas, como los shyrdaks y los tush kyiz (alfombras de fieltro y colgantes bordados), se inspiran en diseños encontrados en la naturaleza, como plantas, animales y paisajes. Incluso la ropa estaba hecha de materiales naturales, y diseñada para ser cómoda y a la vez con estilo.

Los caballos fueron, y siguen siendo, fundamentales para la cultura kirguisa. No sólo proporcionaban transporte, sino que también desempeñaban un papel crucial en las guerras e incluso en la cocina. El kumis (koumiss, kymyz, kumys o kymys) se hace con leche de yegua, y algunos platos tradicionales incluyen carne de caballo. Los caballos desempeñaban tradicionalmente un papel en las ceremonias de cortejo durante el noviazgo y el matrimonio, y podían ser utilizados como pago o como dote. Algunos instrumentos se diseñaron incluso para poder tocarlos a caballo, y el ritmo de los cascos se puede escuchar en la música tradicional kirguisa.

No es de extrañar entonces que la equitación sea valorada en la cultura kirguisa. Los deportes son formas de desarrollar tanto a los jinetes como a los caballos, y de prepararlos para la caza y la batalla. En las competiciones de perros y aves de presa se evaluaban su velocidad y precisión, para encontrar los mejores cazadores, que serían imprescindibles en el invierno.

Muchos de estos elementos todavía se pueden encontrar hoy en día, aunque Kirguistán también es un país moderno. La gente está orgullosa de la cultura en Kirguistán, y se celebran eventos para asegurar que se mantenga viva y se promueva. Los visitantes pueden esperar estar inmersos en estos elementos nómadas y tradicionales, especialmente si se alojan con una familia de acogida.

La Epopeya de Manas en Kirguistán

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La Epopeya de Manas es quizás la parte más famosa de la cultura kirguisa, y es (posiblemente) el poema épico más largo del mundo. Esta epopeya, 20 veces más larga que la Odisea, narra la vida de Manas, un guerrero épico, y de su hijo y nieto. El cuento original se transmitía oralmente de intérprete a intérprete, a los que se conocía con el nombre de manaschi. El cuento fue escrito a partir del siglo XIX y la primera versión completa se publicó en la década de 1920. Desde entonces, la Epopeya de Manas ha sido traducida a muchos idiomas diferentes y publicada en la Unión Soviética y en el extranjero.

Yurtas kirguisas

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Las yurtas kirguisas son una de las partes más esenciales de la cultura kirguisa y son algo más que simples casas. Representan la familia, la tierra y el universo, y cubren todo desde el nacimiento hasta la muerte. Los yurtas poseen gran parte de la cultura kirguisa, desde rituales y ceremonias importantes hasta la artesanía y el arte tradicional.

Las yurtas kirguisas están formadas por una cúpula de postes de abedul atados a una celosía que forma las paredes verticales. El exterior está hecho de fieltro y lana, que es repelente al agua y cálido, y se puede parchear fácilmente según sea necesario. La parte superior de la yurta es un círculo de madera, llamado tunduk, que forma uno de los símbolos más esenciales de la familia y del universo.

Textiles de Kirguistán

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Los textiles de Kirguistán presentan principalmente diseños de la naturaleza y materiales que pueden ser encontrados en las montañas y sus alrededores. El fieltro y la lana son materiales comunes, al igual que las cañas y el hilo de bordar. La mayoría de los motivos y diseños reflejan las montañas, ríos, plantas y animales que viven en Kirguistán.

- Los shyrdaks son el textil kirguís más emblemático, fácilmente reconocible por sus osados diseños.
- Tush kyiz son bordados intrincados, a menudo hechos para matrimonios. Los diseños incluyen plantas y flores, y a veces animales, bordados en un paño suave, y colgados en las paredes de las yurtas.
- Kurak son artículos cosidos juntos a partir de trozos de tela. El nombre kurak proviene de la palabra "kura", lo que significa “cosidos o puestos juntos a partir de piezas separadas”. Kurak pueden ser sombreros, ropa para niños, mantas para cunas, cortinas de boda, colchones, almohadas, fundas para sillas de montar, bolsas o alfombras. Se considera que las sombras contienen poderes mágicos y por lo tanto se utilizaban para varios objetos importantes.
- Ala kyiz también están hechos de fieltro, y pueden tener diseños similares a los shyrdaks, pero están hechos con un proceso diferente.
- Chiy son cañas que crecen en las estepas, y son cosechadas y secadas para hacer esteras.

Música kirguisa

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La música kirguisa es famosa por evocar en abundancia la naturaleza y la vida en las montañas. Muchas canciones tienen letras sobre el estilo de vida nómade, pero incluso sin palabras, la música refleja los sonidos y sentimientos no sólo del paisaje, sino de las experiencias esenciales para vivir allí. En Kirguistán hay una gran variedad de instrumentos, los cuales pueden ser tocados en conjunto o por separado.

- El instrumento más emblemático es el komuz, un instrumento de tres cuerdas similar a una guitarra, pero un poco más pequeño.
- El kyl kyyak es un instrumento vertical con dos cuerdas, generalmente hecho de madera de albaricoque.
- El temir komuz, o arpa de boca, es otro instrumento popular en Kirguistán.
- El chopo-choor es otro instrumento de viento, similar a una ocarina que se asienta cómodamente en la mano, y tiene de tres a seis agujeros para controlar el tono.

Teatros de Kirguistán

A pesar de que Kirguistán no es reconocido como un centro de artes escénicas, la región cuenta con varios escritores y artistas famosos. Hay una próspera escena artística en Kirguistán con teatros y escuelas de arte en todo el país. Los estudiantes pueden estudiar danza, interpretación, música y cine y hay espacios de interpretación que acogen regularmente producciones.

El Teatro Estatal de Ópera y Ballet de Kirguistán fue fundado en 1926 como teatro de formación. El edificio actual se construyó en 1955, y aún hoy en día sigue ofreciendo espectáculos regulares.

Literatura de Kirguistán

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La literatura de Kirguistán se extiende a lo largo de los siglos, aunque no siempre fue escrita. Dado que muy poca de la población estaba alfabetizada hasta hace relativamente poco tiempo, muchos poetas (conocidos como akyns) viajaban de pueblo en pueblo exponiendo sus obras. Algunas obras, como la Epopeya de Manas, fueron memorizadas y transmitidas oralmente entre generaciones de intérpretes, conocidos como manaschi. La alfabetización aumentó bajo la Unión Soviética, cuando la escolarización se hizo más común, y no sólo como parte de la educación religiosa. A partir del siglo XX, los escritores, poetas y lingüistas florecieron, produciendo excelentes obras que se hicieron famosas en todo el mundo.

Caballos kirguises

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Los caballos kirguises son esenciales para el estilo de vida nómada, la vida en las montañas y en las estepas sería imposible sin ellos. Los caballos se utilizaban para todo, desde el transporte hasta la guerra, desde el pago hasta la compañía. La leche de yegua es parte de la cocina kirguisa, y la carne y el cuero también pueden ser productos importantes. Los turistas pueden encontrar fácilmente souvenirs kirguises relacionados con los caballos, como los intrincados látigos de caballo o las sillas de montar antiguas.

Caza con águilas en Kirguistán

La caza con águilas en Kirguistán doradas en una antigua tradición que data de la conquista mongola de Asia Central, alrededor de los siglos XII y XIII, cuando una elegante águila y un buen caballo valían el mismo precio y ambos daban prestigio a sus dueños.

Deportes en Kirguistán

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En Kirguistán, los deportes son más que una simple actividad recreativa: son un entrenamiento de por vida. La gente necesitaba ser fuerte e ingeniosa para sobrevivir en las montañas y las estepas, y los deportes les ayudaban a adquirir la fuerza y las habilidades necesarias. Los deportes también reflejan las tradiciones y los valores del pueblo kirguís, y ayudaron a transmitir su cultura de una generación a otra.

- Los deportes más famosos en Kirguistán son los juegos a caballo. Kok-boru cuenta con dos equipos de jinetes que luchan por la posesión de una oveja muerta, la cual deben depositar en la meta del equipo contrario para conseguir el mayor número de puntos posible.
- La lucha es otro deporte popular en Kirguistán. Aquí, la conexión entre el deporte y la supervivencia es un poco más clara - la fuerza y agilidad son útiles en una variedad de situaciones.
- Las competiciones de caza ayudaron a perfeccionar las habilidades de los animales, como las aves y los perros. Las aves rapaces pueden ser entrenadas como ayuda en la caza, pero nunca son completamente domesticadas.
- Los juegos intelectuales construyen la capacidad de pensar estratégicamente. Ordo, es un juego que consiste en lanzar vértebras para golpear un objetivo en el centro de un círculo.

Ropa kirguisa

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La ropa kirguisa refleja el estilo de vida y las regiones de Kirguistán, con diseños y materiales extraídos de la vida nómada. Lana, fieltro, cuero, pieles y telas gruesas son los principales materiales utilizados para la ropa kirguisa, con adornos extraídos de las tradiciones tribales y de la naturaleza. Aunque muchas personas visten ropa occidental, los elementos tradicionales siguen siendo visibles en todas partes, y la gente, en Kirguistán, está orgullosa de su ropa tradicional.

Monumentos y Sitios de Interés en Kirguistán

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Algunos monumentos y sitios de interés en Kirguistán son de la época Soviética, mientras que otros sólo han aparecido desde la independencia. Nuevas estatuas de Manas y antiguas estatuas de Lenin salpican el país, mientras que también se pueden encontrar monumentos a otras figuras notables (como Chinguiz Aitmátov, Toktogul Satilganov y Przhevalsky). En Bishkek, también hay monumentos a los que murieron en la Segunda Guerra Mundial (en la Plaza de la Victoria), y un monumento a los que murieron por la libertad (en homenaje a los muertos en la revolución de 2010). Ata-Beyit, cerca de Bishkek, es un complejo conmemorativo situado cerca de una fosa común donde los presos políticos habían sido ejecutados, y sirve como memorial a los que murieron durante las purgas políticas.

Museos de Kirguistán

Aunque los museos (en Ingles) de Kirguistán pueden no ser los más famosos ni lo más destacado de un viaje, siguen siendo importantes e informativos. El Museo Histórico Estatal y el Museo de Bellas Artes de Bishkek son dos de los museos más grandes y famosos de Kirguistán, pero un viaje a Bishkek sería incompleto sin visitar la Casa-Museo de Frunze, donde los visitantes pueden entrar en su casa perfectamente conservada. El Museo Histórico y Arqueológico Estatal de Osh exhibe el único Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO en Kirguistán, mientras que la Casa-Museo de Przhevalsky (Przewalski) en Karakol es un tributo al famoso explorador, uno de los primeros en trazar un mapa de la zona. Junto a la Torre de Burana hay un museo arqueológico, donde los visitantes pueden aprender más sobre la historia antigua de Kirguistán.